lunes, 17 de septiembre de 2007

El Asombroso Viaje

Aquí en casa las cosas han vuelto a la normalidad. Después de meses de constantes actividades y aventuras finalmente hemos calmado un poco ese ritmo que nos llevaba de un asunto a otro. El Dr. Filkenstein y yo recuperamos nuestra personalidad de manera natural, yo estaba tomando un baño y el Dr. leía la página 40 (la más difícil) de "listertorinolomía parofilástica para menores de 10 pero mayores de 5, 2da edición" cuando se sintió como un temblor en casa y las personalidades se re-encajaron con una facilidad inesperada. Fue agradable sentirse normal pero lo mejor fue el cambio en el Dr. que después de semejante experiencia quedó algo asustado y decidió suspender sus experimentos por unos meses y dedicarse a una vida un poco más natural.

Con el laboratorio cerrado las posibilidades de un accidente se reducen en un 92% por lo que por primera vez en meses pude andar relajado por la casa y fijarme en muchas cosas que normalmente no noto. Como esta esquina de mi casa por ejemplo.



Es una esquina de mi casa y delimita la parte donde dos paredes se unen, es algo muy emocionante porque si no fuera por la esquina, las paredes se irían de largo y mi casa no tendría fin y el mundo estaría dividido por dos grande muros y la gente trataría de cruzar al otro lado y yo estaría en serios problemas.

Tal vez deberíamos re-abrir el laboratorio.

No es que me aburra, yo le encuentro lo entretenido a todo, pero tal vez ustedes no se diviertan con mis descubrimientos en casa y hay que pensar en los demás, yo no soy egoísta. De todas formas no es mi decisión abrirlo, el Dr. está abonando el huerto que hizo en el techo y disfrutando de caminar descalzo por todas partes, no creo que cambie de opinión muy pronto.

Así que mejor vamos a ver unas fotos.

No, no son diapositivas de la conferencia "como dar una conferencia aburrida" a la que asistí la semana pasada (la cual estuvo muy interesante, no aprendí nada). Sucede que hace poco llegó a mis manos un celular con cámara y me he dedicado a viajar por el mundo buscando pruebas de la existencia del mundo. Existe.

Esta es una foto de un concurso de pruebas mentales bajo presión que se desarrolló en Waskethchewa, Wisconsin. Estamos viendo la prueba 4 "Desenreda los cables en menos de un minuto o te freímos un dedo", ganó el tipo de China.


Después llegué al santuario del milagroso niño viejo, bien adentro en nuestra provincia. Me fui a hacer una curación pero en el camino me topé con un tipo muy amable que hacía curaciones express por la mitad del dinero ¡Extraordinario!. "¡Usted es mi tipo de persona!" le dije y él con un tono de sabio y milagroso me dijo "Ya pero deme rapidito la plata". Al final solo le tomé una foto al poster del milagroso niño viejo.

El vuelto que me dio el tipo milagroso justo antes de correr de la policía (creo que hacen jogging juntos) me pareció peculiar. ¿Se lee lo que dice? LESBIAN MONEY. Mira tú que suerte la mía. Este no es como cualquier dinero, ¡este es dinero de lesbianas! Quien sabe que actos se han cometido con este dinero en el bolsillo. Un pequeño tesoro.

Este es el piso del hotel en Las Vegas donde fui golpeado por intentar pagar con dinero de lesbianas. "¡Tu no eres una lesbiana!" me dijo el tipo grande antes de atinarle a mi cara con su puño y dejarme inconsciente en el piso del hotel, la foto la tomé segundos antes del blackout.











Ya quería volver a casa, pero no me iba a ir sin antes ver el espectáculo del León que se viste como Prince pero que baila como Michael Jackson. El espectáculo estuvo maravilloso, pero no dejan tomar fotos por lo que solo le pude tomar al poster. Groovy.



Volviendo a casa después de un largo viaje a través del espejo.

Y así terminó todo, en calma, con el sol detrás mio, persiguiéndome freneticamente para destruirme más allá del reconocimiento por haber alentado a su hijo a seguir la carrera de publicidad, creo que tiene razón en odiarme el sol. Cuando volví a casa el Dr. Filkenstein estaba en el laboratorio, preparando algo para que las plantas en el techo crezcan más rápido y hablen francés, pobre tipo no sabe que la mayoría ya hablan francés.


2 comentarios:

|_Bonny_| dijo...

Yo quiero el dinero para lesbianas!!

Quizás debería llevarte a los juegos de basket de las lesbinas acá en la Kennedy. Allí no te golpearía ningún guardia. Ellas pueden hacerlo todo!

Anónimo dijo...

Jajajaaja yo también quiero el dinero de lesbianas! seria tan útil!