martes, 23 de enero de 2007

La máquina de sueños

La máquina de sueños del Dr. Filkenstein fue alucinante, me permitió escoger mis sueños completamente mientras lograra recordarlos. Tengo buena memoria.

Use la máquina de mala gana, el Dr. Filkenstein insistía en que primero debía beber 3 vasos de agua porque soñar deshidrata, solo tome 2 y medio porque estaba lleno. Me senté en la silla del laboratorio y aplasté el botón rojo, siempre es el rojo.

Pamela Anderson apareció pero cuando el Dr. Filkenstein me hizo saber que se podían ver mis sueños por la pantalla, prefería pasar a otra cosa, lastima. Me fui a un sueño de cuando era niño y la ciudad se convertía en sanduches de atún, y los edificios eran de atún con mayonesa y pan y a veces con perejil y otras cosas que le dan sabor. Me comí la ciudad.

Luego terminé una carrera en primer lugar pero llegue de último, eso me pasa a veces.

Luego vino mi esposa y se unió, me mostró un sueño de postres de color rojo y bailarines de tango, muy hojaldrístico y peristáltico, o divertido quise decir.

Luego la máquina se descargo y el Dr. Filkenstein ya estaba trabajando en otra idea, de seguro me estará molestando luego, no se que hacer con él. Ya se irá.

Espero.

2 comentarios:

|_Bonny_| dijo...

Interesante...
Debería darte verguenza, soñar con Pamela Anderson!!!!
Mejor con Lindsay Lohan..

Lilia Franco Sánchez dijo...

Khalil no quiere aceptar mi nuevo super poder...puedo convertir las cosas en nacho... Lo converti un ratito y dejo de quejarse.